Hola amiga Esperanza,
mi novia es una persona muy sensible a estos temas que yo también estudié de joven. A los 17 años ya me había leído todo Freud que no es poco...
Desde luego, que hay que tomar estas cosas muy en serio, y yo las tomo siempre, sin duda alguna.
Sobre este asunto, hay que decir que existe mucha bibliografía, muy extensa, pero tan dispersa como son los diferentes tipos de depresión o depresiones. La depresión como todos sabemos, o deberíamos de saber, es un enorme cajón de sastre, sin ser en absoluto cosas iguales, ocurre con ese concepto, algo parecido a lo que es la FM..

Un saco enorme donde se meten varias patologías diversas que en muchos casos no tienen que ver entre ellas, y lo que es peor, el uso de la palabra depre, depresión se ha generalizado y trivializado tanto que algunos dicen: Hoy estoy depre... como el que dice que se va a tomar un café...
Freud llamó a la depresión: Angustia existencial, y la trata como algo inherente al ser humano, a sus dudas, al hecho de estar vivo y pensar...
En una primera clasificación muy somera podríamos decir que existen dos grandes grupos de afecciones: Las exógenas y las endógenas. Las exógenas vienen de situaciones externas a nosotros, como puede ser un cambio del entorno familiar, laboral, etc... Cuando esa situación se revierte, el asunto se resuelve. Puede ser el caso de tener un vecino ruidoso, una familia muy puñetera, un conyugue en paro, etc... si la situación desaparece, nos volvemos a sentir estables y bien.
Por desgracia las patologías endógenas es decir internas tienen su base en un profundo desacuerdo con nosotros mismos, estas son las más frecuentes, y se deben a la no aceptación de como somos o como nos encontramos. En algunos casos es algo que tiene que ver con nuestra propia esencia mental o forma de ser, en otros casos viene cuando descubrimos que estamos enfermos de EA, de FM, etc... y es cuando no nos gusta nuestro cuerpo porque está herido, o simplemente nos encontramos gordos, flacos, flácidos, etc...
En estos casos de estado depresivo endógeno, muchas persona piensan que si les tocara la lotería, si vieran sus sueños cumplidos, etc... y no es así: Uno puede ser inmensamente rico, tener un matrimonio de ensueño, unos hijos adorables, un trabajo muy interesante, etc... Nada de eso hace que se sienta bien, porque su problema es consigo mismo, y nada de lo que le afecta desde fuera mejora su situación. Es terrible, pero es así...
Por otra parte, la depresión como decía al principio es algo prácticamente inclasificable: No hay dos cuadros depresivos iguales incluso en la misma persona, y no se puede comparar un estado con el del vecino, que también está en una situación similar. Podríamos decir que cada estado de depresión es como un ente vivo que tiene su propia esencia y razón de ser y que probablemente nunca se va a repetir: Tendremos otro tal vez, pero nunca será igual.
Por eso los psicólogos o los psico-analistas se dedican a estudiar cada caso concreto con la persona, marcando por un lado unas pautas básicas, y por otro lado otras pautas concretas adaptadas a cada caso... Es muy complicado, y las posibilidades de éxito son mínimas si el paciente no pone toda la carne en el asador...
En fin, por otra parte hay estudiosos que atribuyen la FM a la depresión y no al revés. Es decir tienes FM porque estás deprimido, y no estás deprimido por tener FM... Sinceramente me parece un análisis demasiado simplista, pero es a veces el imperante en estamentos como la SS. Hay que tener en cuenta que las enfermedades que solo se pueden diagnosticar cuando lo dice el paciente, como por ejemplo, estados de dolor crónico, de fatiga, o de otro tipo, son muy complicados de analizar y resolver: El médico siempre quiere tener pruebas tangibles en forma de placas, análisis, etc... La "suerte" de los que tenemos EA avanzada es que todo queda a la vista y no se puede negar nada, al igual que la AR, pero claro en la FM, la solución simplificadora de decir que todo es debido a un estado depresivo, esa es la más sencilla para ahorrarse trabajo y problemas...
Diré que quienes defienden esa postura, tienen en parte algo de razón como pasa con todas las verdades a medias, que son las peores mentiras. En una situación de supervivencia, la pirámide de necesidades es otra, y por ejemplo una mujer africana de un país pobre con 6 hijos a cuestas no tiene opción a deprimirse: Cuando se levanta no sabe ni siquiera si podrá dar de comer a sus hijos, así que sus preocupaciones básicas son otras... Esa mujer no puede ponerse a reflexionar sobre si le gusta esto o lo otro, si su vida es un desastre, si se le caen los pechos o si su suegra le habla, etc... Tiene cosas más importantes que hacer como es el buscar alimento para ella y su prole...

Triste pero jodidamente cierto... Por eso se atribuye la depresión a otros niveles de cofort y se la considera enfermedad de país rico y de gente ociosa.
Personalmente no estoy nada de acuerdo con ese análisis, pero impera a menudo, aunque me lo ha aplicado más de una vez:
-Me siento mal, pero tengo un médico donde acudir, mientras un pobre de una tribu de Brasil perdido en la selva no tiene donde ir con su dolor.
-El dolor me taladra, pero tengo una farmacia abierta donde comprar anagésicos y un médico que me los receta, otros no tienen eso ni por asomo.
-No sé si me podré levantar esta mañana, pero hay cientos de millones de personas que no se pueden ni tan solo plantear esa pregunta, porque no tienen opción: Si no se levantan no comen no dan de comer a su familia, y no sobreviven.
Me duele porque está lloviendo y la humedad de mata: Vale pero no me mojo, tengo calefacción y mi casa está abrigada mientras que en el mundo hay millones de sin-hogar, incluso a 100 metros de mi casa ya los hay, y salvo una marquesina de tienda o una boca de metro no tienen donde cobijarse cuando llueve... y menos aún cuando sopla el viento helado de invierno...
Respuestas como estas las hay a millones, y son ciertas. A veces ese pequeño ejercicio de humildad propia de un habitante de país rico es necesario para relativizar nuestra terrible situación.
En mi caso, a veces, solo tengo que recordarme con 7 años de edad viajando con mi maleta de madera en trenes infectos, donde no cabía la posibilidad de pararme o de quejarme. Mis padres iban mil veces más cargados que yo, y no les cabía ni un solo bulto en la mano, así que aún recuerdo esas inmensas estaciones donde se nos trataba como ganado humano, y el esfuerzo indiscutible que tenía que hacer sin rechistar y sin opción a poder decir: Estoy cansado y tengo que parar... Esa opción no era ni siquiera una opción contemplada cuando me tocó emigrar de pequeño, y cuando nos mudábamos no habían camiones de mudanzas ni nada que se les pareciera, cuando me tocó salir de este país con mis padres, el mundo era un enemigo en potencia y al único que tenías de tu lado era a ti mismo. No es desde luego necesario que NADIE tenga que pasar por eso, y no se lo deseo a nadie, pero a veces (por lo menos para mi) es bueno recordar que no siempre viví tal como ahora, no siempre he tenido un cuarto de baño dentro de casa y no siempre he podido comer lo que quería, ni siquiera bastante...
En mi caso personal, reconozco que siempre me ha ayudado recordar mi propia infancia de penurias para valorar algo mejor las cosas buenas que tengo... También me ha ayudado recordar que aunque me quejara por el trabajo y el sueldo he vivido 1000 veces mejor que mis padres que siempre fueron burros de carga abocados a hacer de esclavos de otros, siempre mal pagados y sin descanso hasta su muerte... Francamente a pesar de todos los pesares, incluida mi agresiva y destructiva EA, no me puedo quejar, o por lo menos, soy totalmente consciente que hay personas que viven, han vivido y lo que es peor, vivirán aún en estos tiempos, en condiciones infrahumanas al lado de las cuales, mi vida ha sido un verdadero camino de rosas...

Y no lo digo como un consuelo de tontos, sencillamente miro lo que me conviene ver y por eso no me interesa analizar ni envidiar a la gente que no da golpe e ingresa 100 veces más que yo, esos no son de los míos y francamente me la sopla lo que hacen con su vida... Lo que veo cuando miro atrás, es la inmensa cantidad de gente que vive mucho peor que yo y entonces tomo conciencia de lo bien que me ha ido...
Volviendo al tema: Hay que aceptar que esas patologías mentales transcurren con cierto paralelismo con las enfermedades físicas tradicionales: Hoy se dice que muchos mas seres vivos que hace 100 años morimos y/o moriremos de cancer. En mi caso es posible ya que no hubiese sobrevivido de pequeño si no llega a ser porque a pesar de lo mal que se vivía en los años 50, nuestra escasa sanidad pública me salvó y me ha permitido sobrevivir. Es hasta cierto punto "normal" que me muera de cancer o de otra cosa crónica y extendida... Al fin y al cabo hay que morir de algo, y si no lo haces de pequeño porque hoy salvamos a la mayoría de los críos (por suerte), pues enfermedades como en Cancer hacen estragos en la población, ya que muchos de los que se lleva ahora, hace 100 años no hubiesemos llegado nunca a ser adultos... Eso mismo se puede poner en paraleo con nuestras Depresiones: A falta de enfermedades terribles como ocurre en el tercer mundo, de muertes infantiles y de tremendas catástrofes y epidemias, nuestros sentidos y nuestra mente se ha abierto camino a otras formas de insatisfacción ante la vida cotidiana y esa vía de insatisfacción es nuestra peor epidemia: La Depresion !!! que también es muy dura de llevar, pero aún así, no deja de ser una vía de escape de mucho más alto nivel que las de los desheredados de la tierra, ya que una vez cubiertas todas nuestras necesidades básicas de todo tipo, como comer, vivir y tener comodidades (el sueño para los que en este mundo no tienen nada), ya nos buscamos algo para seguir sintiéndonos insatisfechos. Normalmente y aunque la mayoría no lo sabemos, esa depresión endógena no se resuelve nunca con añadidos externos como el dinero, mejor vida, la lotería, o la pareja del siglo y los hijos perfectos, el insatisfecho consigo mismo, nunca va a cambiar aunque tuviera el mundo a sus pies. Del mismo modo que un insatisfecho con su cuerpo nunca verá la felicidad aunque tenga millones de euros y 1000 cirujanos plásticos cambiandole el cuerpo cada día... La única salida que tiene es aceptarse como es. Esa es la única salida para todos los males endógenos, lo queramos o no... Y el problema es que es realmente complejo el hacer entender a un paciente que lo único que tiene que hacer es aceptarse tal como es. Así de sencillo y de duro a la vez...
En fin, un tema infinito y un debate apasionante, lástima que sea tan doloros: Hay millones de personas sufriendo de ese algo llamado depresión que nadie sabe muy bien donde tiene las asideras para enfrentarlo y tomarlo por los cuernos... No es sencillo enfrentar lo que no tiene una forma definida porque no es algo parecido a un catarro que se va con 3 días de cama y dos aspirinas, por desgracia es algo más serio...
Venga, lamento el tostón, que me enrollo (como siempre

).
