Para diagnosticar la enfermedad de Crohn, el médico necesita obtener un historial clínico detallado y los resultados de un examen físico y ciertas pruebas. Durante su consulta, el médico
*preguntará sobre sus síntomas y su salud
*tal vez le haga algunas pruebas de sangre
*quizás le pida una muestra de heces
Las pruebas de sangre pueden detectar anemia, la que puedesignificar que usted tiene sangrado en los intestinos. Estas pruebas también pueden detectar si usted tiene una cantidad alta de glóbulos blancos, un signo de inflamación en el cuerpo. Se puede usar una muestra de heces para determinar si hay sangrado. Esto verifica que el problema no es causado por una infección.
El médico tal vez le haga otras pruebas o procedimientos para detectar la enfermedad.
*Radiografías. Además de radiografías rutinarias, a veces el médico toma una radiografía especializada llamada serie gastrointestinal (“upper GI series” en inglés).
*Tránsitointestinal (“small bowel follow-through” en inglés). Se usa esta prueba para determinar la condición de su intestino delgado. Si le hiciera esta prueba, tendría que tomar bario, un líquido lechoso. El bario luce blanco en una película radiográfica, lo que ayuda al médico a ver úlceras y otros problemas.
*Sigmoidoscopia o colonoscopia. Estas pruebas se usan para examinar mejor el interior de los intestinos. Para ambas pruebas, el médico coloca un tubo largo en el ano. El tubo viaja cerca de 3 pies en el intestino grueso y algunas veces hacia el extremo del intestino delgado. El tubo está conectado a una pantalla de video que muestra imágenes de los intestinos. Por eso el médico puede ver cualquier inflamación, úlceras o sangrado.
*Biopsia. En una biopsia se quita una porción de tejido, en este caso de la mucosa intestinal. El médico examina el tejido con un microscopio para confirmar el diagnóstico de enfermedad de Crohn. Para este procedimiento tomaría una medicina para sedarlo. La biopsia no se siente.
Fuente: niddk.nih.gov
Diagnóstico
Colonoscopia: la colonoscopia es la prueba de elección para el diagnóstico de la enfermedad de Crohn. También esta prueba es importante para determinar el curso de la enfermedad y la respuesta al traramiento. Sin embargo, como ninguno de los hallazgos endoscópicos es específico de la enfermedad de Crohn, el diagnóstico final se consigue mediante la combinación de los resultados clínicos, endoscópicos e histológicos.
En la enfermedad de Crohn a diferencia de lo que ocurre en la colitis ulcerativa (*), las lesiones endoscópicas están dispersas y son asimétricas y heterogéneas. Es tipica la presencia de segmentos de mucosa normal interpuestos entre áreas anormales, si bien este hecho debe ser confirmado mediante biopsia. En el 50% de los casos, el recto no está afectado. La presencia de pequeñas ulceraciones en la válvula ileocecal o en el ileo terminal es prácticamente patognomónica de la enfermadad de Crohn.
Diagnóstico por imágenes: a pesar de la amplia difusión de la endoscopia, las imágenes radiológicas siguen jugando un importante papel en el diagóstico. evaluación y tratamiento de la enfermedad de Crohn. Rn el pasado, los estudios con bario eran la única forma de poder estudiar el intestino delgado y el colon. Hoy día, se dispone de una amplia bateria de pruebas, que incluyen la tomografía computarizada, la resonancia magnétic nuclear, la ultrasonografía y las imágenes con radionucleídos
Exámenes radiográficos: se disponen de varios métodos de estudio: la radiografia seriada del intestino delgado (*) , la enteroclisis, el enema de bario, las series del tracto digestivo superior. En el primer caso, el paciente ingiere una papilla de bario y se hacen radiografías a intervalos de 20-30 minutos. Cuando el bario alcanza el colon (30 a 90 minutos), bajo control fluoroscópico, el radiologo comprime vigorosamente el intestino delgado mientras que el paciente adopta diversas posturas.
En en caso de la enteroclisis, se pasa un tubo a través de la nariz, el esófago y el estómago hasta llegar al yeyuno, justo después del ligamento de Treitz. Se infla entonces un pequeño balón para mantener el tubo en posición y, bajo control fluoroscópico se infunden 200 a 250 ml de una papilla de bario especial y 750 a 1.000 ml de una solución de metilcelulosa. Estas soluciones ocasionan una distensión y recubrimiento de las paredes del intestino delgado
El enema de bario de doble contraste es una herramienta muy útil para evaluar la enfermedad inflamatoria intestinal. Permite determinar el diámetro y la extensión de las constricciones colónicas y la presencia de fístulas. Además permite ver zonas del intestino que a las que no llega la colonoscopia. La técnica de doble contraste consiste en introducir a través de un tubo rectal una suspensión viscosa de sulfato de bario y, bajo control fluoroscópico se inyecta aire hasta que todo el colon se distiende y el bario queda adherido a sus paredes.
El enema de bario simple es también útil en el examen del colon cuando se sospecha obstrucciones o fístula, pero no detecta alteraciones de la mucosa y pequeñas úlceras
Las series radiográficas del tracto digestivo superior se llevan a cabo haciendo que el paciente ingiera una papilla de bario bastante fluída. En las radiografias de simple contraste solo se administra el bario o una solución de contraste mientras que en las de doble contraste de después del bario se administran 4 a 6 g, pastillas efervescentes lo que ocasiona la distensión del tracto digestivo superior. Las series permiten una evaluación de esófago, estómago y partes iniciales del intestino delgado
Tomografía computarizada: la TC se ha mostrado muy útil como complemento de los estudios radiográficos. Estos últimos son mejores para comprobar la extensión de las lesiones mucosas, mientras que las TCs determinan mejor la afectación de las paredes intestinales y la extensión de las lesiones extraluminales. En estas pruebas, el paciente es tratado con 750-1000 ml de una solución al 3% de un contraste 60-90 minutos antes de prueba y una dosis adicional de 250 ml al comienzo de la misma.
En estas condiciones se consigue una opacificación adecuada del estómago y del intestino delgado. En los casos en los que se sospeche una afectación rectosigmoide, la solución de contraste puede ser administrada por vía rectal. Ocasionalmente se ha utilizado bario diluído.
Sin embargo, tanto los contrastes iodados como el bario aparecen en blanco en las TCs interfiriendo con algunas las lesiones más sutiles. Por ello, muchos autores consideran mejor la administración de agua como medio de contraste.
La administración intravenosa de un medio de contraste puede ser necesaria para evaluar el grado de afectación extraluminal.
En los escáneres de TC estandar, el abdomen debe ser examinado desde el diafragma hasta el perineo. La tomografía espiral, con una rápida infusión del medio de contraste permite la obtención de imágenes del abdomen a intevalos de 5 mm en menos de 30 segundos, lo que minimiza los artefactos que pueden ser introducidos por la respiración del paciente.
Hoy día, el desarollo de escáneres de TC con filas de multidetectores (MDCT, multidetector-raw CT) permiten la obtención de 4 a 16 imágenes en menos de un segundo a intervalos de 0.5 a 1 mm
Resonancia magnética: la aplicación de la resonancia al tracto ha estado tradicionalmente limitada por los movimientos del peristaltismo intestnal y por la ausencia de agentes de contraste apropiados. Hoy día, los modernos aparatos son tan rápidos que pueden obviarse los problemas asociados al movimiento. Además, se han desarrollado contrastes (p.ej. bromuro de perfluorooctilo y aceites vegetales) . Varios estudios sugieren que la RM puede ser una herramienta útil, en particular para revelar el ensanchamiento de las paredes intestinales
Ultrasonografía: la ultrasonografía es una técnica no invasiva que está popularizándose en el estudio del tracto digestivo, sobre todo en niños. La sonografía del radiante inferior derecho utilizando los modernos transductores de 3.5 o 5 MHz permite una buena visualización del intestino delgado distal. Pueden verse bastante bien el grosor de la pared intestinal y la ecotextura.
La aplicación de la sonografía Doppler en color permite diferencar el engrosamiento activo de la pared intestinal (hay un aumento del flujo sanguíneo) del engrosamiento pasivo/fibrosis
Gammagrafía: la gammagrafía con leucocitos marcados con indio y tecnecio permite determinar en que sitios del intestino se localiza la inflamación. A diferencia del galio-67 que se excreta intestinalmente lo que dificulta la interpretación de los resultado, los leucocitos marcados con indio y sobre todo con tecnecio-99m-hexametilpropilamina oxima se están utilizando con frecuencia creciente en el cribado de los pacientes con enfermedades inflamatorias del intestino
Fuente: iqb.es